El Lago Titicaca es considerado como el lago más importante del mundo y declarado como patrimonio de Puno, del Perú y del mundo. Además, cuenta con una rica diversidad biológica y socio cultural con poblaciones quechuas y aimaras. Sin embargo, su cuenca está en una precaria situación ambiental debido a la contaminación y por un inadecuado tratamiento de las aguas residuales.
Por ello, atendiendo una demanda histórica de más de 30 años, las 10 municipalidades provinciales ubicadas alrededor del Titicaca (Puno, Juliaca, Ayaviri, Juli, Ilave, Moho, Azángaro, Huancané, Lampa y Yunguyo) transfirieron al Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS) sus competencias con respecto al tratamiento integral de aguas residuales de su localidad, a través de un convenio. El proyecto fue declarado como una necesidad pública por el gobierno nacional en el Decreto Supremo N° 005-2013-EF.
Tras ello, el MVCS, en coordinación con las autoridades de las 10 provincias, encargó a ProInversión la promoción del proyecto como una Asociación Público-Privada, bajo la modalidad de Iniciativa Privada Cofinanciada. Fue descartado realizarlo como obra pública, debido a que, según reportes de SUNASS, el 80% de las Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales construidas como obra pública y operada por las EPS municipales, tienen limitaciones para lograr la operación y el mantenimiento eficiente de la infraestructura.
El Estado peruano evaluó el estudio de preinversión del proyecto PTAR Titicaca en función a las leyes y a las necesidades. Una vez aprobado, ProInversión formuló el proyecto de APP y definió la promoción que haría para que una empresa privada diseñe, ejecute, opere y mantenga durante 30 años la infraestructura.
El 30 de octubre de 2019 el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento suscribió el Contrato de Concesión con la concesionaria Operadora Ecológica del Titicaca S.A.C. – OPETI.